Aguacates con acento andaluz: el Hass del Valle de Lecrín - Alqueria de los lentos
- Christoph Van Daele

- hace 3 días
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En el Valle de Lecrín, en Granada, los aguacates crecen donde uno menos lo espera: entre acequias antiguas, lomas orientadas al sol y un clima que parece hecho a medida. Aquí, la tierra no corre. Observa, espera y responde.
Estos aguacates llegan a la Alquería de los Lentos de la mano de Sergio, campesino del valle, que los cultiva en su propia finca y nos los trae directamente desde el campo. Sin intermediarios, sin prisas, sin artificios. Del árbol a la alquería, casi con el polvo del camino aún en la piel.
Su finca se encuentra en la Loma del Chite, orientada al sur, con vistas abiertas a la presa de Béznar y un pequeño cortijo como corazón del terreno. Allí, en el año del COVID, Sergio plantó unas 150 plantas de aguacate, casi como un acto de fe en el futuro. Un cultivo que hoy demuestra que la paciencia también da frutos.
Se trata de un cultivo ecológico de aguacate de la variedad Hass, que se ha adaptado especialmente bien a este entorno. El agua de la acequia de la Comunidad de Regantes de Chite, que toma su caudal del río Dúrcal, junto al clima suave del valle, la bruma que asciende desde la presa de Béznar y los vientos templados que llegan desde la Costa, crean un microclima perfecto para estas plantas. Todo conspira a favor del árbol.
La variedad Hass es la gran protagonista. Su piel verde se oscurece al madurar y protege una pulpa cremosa, con ese sabor profundo que recuerda ligeramente a la avellana. Rica en grasas saludables, fibra, potasio y vitaminas A, C, D, E, K y del grupo B, es un alimento completo y honesto, sin necesidad de maquillajes.
Los aguacates se recogen aún verdes, directamente del árbol, y maduran en casa. A temperatura ambiente, fuera de la nevera, encuentran su punto poco a poco. Cuando ceden ligeramente al tacto y la piel se ha oscurecido, están listos. Un gesto sencillo, casi doméstico, que nos devuelve al ritmo natural de las cosas.
En la cocina, estos aguacates no piden protagonismo. Funcionan en ensaladas simples, con cítricos del valle, acompañando pescados o simplemente abiertos, con aceite de oliva y una pizca de sal. Cuando el producto es bueno, el silencio también alimenta.
En la Alquería de los Lentos puedes comprar los aguacates de Sergio en sacos de 3 kg, de variedad Hass, por 12 € el saco. Un producto de cercanía, ecológico y con nombre propio.
Hablar de estos aguacates es hablar de un valle que se cuida a sí mismo. De campesinos que siguen escuchando la tierra. Y de pequeñas decisiones cotidianas que, sin hacer ruido, construyen futuro.
Aguacates con acento andaluz: el Hass del Valle de Lecrín en venta en Alqueria de los lentos
















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